10K EL ALTET 2025
Después del fiasco en Vall de Boí, tocaba reinventarse: vuelta al asfalto, entrenador y primera prueba seria en el 10k de El Altet, todavía con clima veraniego
Del fracaso de Vall de Boí al nuevo objetivo
¡Un momento! ¿Un 10k de asfalto como nueva entrada del blog después de un parón de cuatro meses de publicaciones? ¿Qué ha sido del Trail? ¿Qué fue del maratón de Vall de Boí?
Todo esto te lo podrías estar preguntando (o te importa tres pitos, que también podría ser) y no te falta razón. La cosa se torció en Vall de Boí en junio y no necesité ni 7km para sentirme reventado y decidir no continuar con la carrera. Mala preparación, demasiados km a última hora según se acercaba la fecha de la carrera, con prisas, que me dejaron muy cansado... Visto con distancia, era de esperar que se diera mal, aunque no contaba con apenas poder empezarla.
¿Qué pasó después? Con el objetivo del maratón de Elche-Alicante ya en mente hacía tiempo, me tomé unos días libres y allá por el día 14 de julio me puse en manos de Nicolas Tucci, entrenador del grupo La Tribu Alicantina. Ya había seguido a su grupo y su trabajo mucho tiempo por redes y conocía a algunos miembros del equipo. Tenía claro que para algo tan exigente como un maratón de asfalto no podía cometer el error de algunas carreras largas que había acabado en mejor o peor estado anteriormente en montaña. El maratón de asfalto, aunque solo fuera para finalizarlo sin reventar preparándolo o corriéndolo, entendí que debía prepararse a conciencia y con ayuda profesional.
El regreso al asfalto con La Tribu Alicantina
Así, en pleno verano ya estaba metido en faena con La Tribu, viendo lo mal que ha sentado el paso de los años a mi versión asfaltera y la cantidad de trabajo que había por delante si quería llegar a punto el día 30 de noviembre a la salida del maratón. La cosa ha ido mejorando, ya con más de medio planning cumplido, y por el camino ha habido algunos test de carrera que no han dejado buen sabor de boca, pero que creo que son indispensables para ir construyendo la que pueda ser mi mejor versión maratoniana hasta que arranque Elche-Alicante.
Una de las pruebas fue un 5k a mitad de agosto, con el equipo, que ya puso datos reales a mi flojera asfaltera. Hace mucho que no compito asfalto ni velocidad, así que lo asumí deportivamente y a seguir. La otra, el siguiente test, os lo cuento en la crónica de hoy, mi participación en el 10k de El Altet el pasado día 27 de septiembre.
Siempre había escuchado hablar muy bien de esta carrera que organiza el Club Deportivo El Altet y, además, mi grupo de entrenamiento tiene la costumbre de participar en ella como inicio de temporada, logrando alguna vez el premio de equipo más numeroso (este año nos superó Km a Km de Elche, imbatibles) así que parecía una buena oportunidad para probar mi estado en un 10000 asfaltero.
El día del 10k de El Altet
Llegué con mucha antelación a la carrera, aparcando sin dificultad en un descampado cercano detrás de la Plaza Mayor, donde estaba la carpa de entrega de premios. Recogí el dorsal y la camiseta, saludé brevemente a Nico antes de volver a cambiarme y me puse por primera vez la equipación de La Tribu. Arrancaríamos a las 18:30h, demasiado temprano, tal vez, para el calor y la humedad que todavía sufríamos en Alicante (empezar 1h más tarde mejoraría mucho la sensación térmica). Nada beneficioso para mi vuelta al asfalto si le añadíamos, además, el perfil ondulado que parecía que iba a encontrarme. Así me lo comentaban los compañeros de La Tribu Pedro, Pep o Adrián mientras nos hacíamos la foto de equipo, saludando al gran marchador alicantino Francisco Martín "Pacorro", liado en las labores de organización, pero siempre atento y con una sonrisa para todo el que le saludara. También me crucé con Alex Villena, del podcast Altura Vertical, de escucha obligada para cualquier aficionado al Trail de Alicante. Qué hacíamos los dos en una de asfalto, nos preguntábamos, mientras comentábamos lo que ya nos habían dicho quienes habían corrido El Altet. Iba a ser carrera sufrida, por lo visto.
Un calentamiento suave por la zona ya dejaba adivinar que no se equivocaban mis compañeros de La Tribu, hablando del desnivel. Desde el arco de salida, en ambos sentidos de la avenida, ya se podía apreciar el sube baja que nos íbamos a encontrar durante todo el circuito. La humedad y el calor, junto a una inquietante sensación de fatiga en las piernas, no ayudaban tampoco a que me sintiera optimista. Había bajado la carga del entrenamiento maratoniano los últimos días y no llegaba con tanta fatiga acumulada como las semanas anteriores, pero estaba muy lejos de sentirme en plena forma. ¿Estaba en condiciones de bajar ni siquiera de 50'?
Me situé en el pelotón de salida intentando no quedarme muy atrasado, pues la participación era muy alta sumando el 5 y el 10k, y salimos puntuales a la hora programada. No me costó quedarme al ritmo que consideraba aceptable y algo conservador para la primera vuelta, cerca del 4:50/km y, después de unos 500m en dirección al Parque S.Francisco de Asís por la calle del mismo nombre, pasamos la rotonda sobre el túnel de El Altet y durante 400m vamos en suave ascenso hasta el parque, donde giramos y deshacemos camino.
Garmin pita marcando el primer mil cerca de 4:50, así que parece que todo está controlado. Vamos bajando todo lo subido anteriormente, superamos el repecho que nos mete en la rotonda y en lugar de seguir deshaciendo giramos hacia la zona en la que he aparcado. Con perfil algo más llano y viendo algunas terrazas de bares con público animando subo un poco el ritmo. Al cruzarnos con la carretera nacional giramos y salimos en dirección al polideportivo, en una larga y solitaria recta de unos 700m con una ligerísima tendencia ascendente que termina con un giro hacia la rotonda del templo de Santa María del mar.
Garmin ya ha avisado de otro mil más, a 4:42 aproximadamente. Algo me dice que para un ritmo que consideraba no muy exigente no voy tan suelto como esperaba. Aprovechando que después del giro hay unos 500m hasta la rotonda y de ahí, girando en dirección a playas de El Altet, todavía bajamos un poco, muy suavemente, me dejo caer sin forzar tratando de recuperar sensaciones y aire. El km 3 ha pitado ya en el reloj a 4:55, pero no termino de sentirme mejor, aunque haya bajado el ritmo.
El circuito vuelve a subir camino a la última rotonda que me queda por conocer en el recorrido y durante unos 300m nos hace ganar unos 6 o 7m que, ahora sí, se me atragantan un poco.
Cambiamos de sentido, bajando hacia la rotonda de la iglesia, y desde el km 4 al 5 la tendencia ya es claramente ascendente, metiéndonos en el cuerpo unos 17m de ascenso. Nada especialmente duro, pero empiezo a notar mucho calor, humedad y cansancio. Este suave ascenso da un respiro al pasar por la iglesia, donde salimos de la avenida girando unas 3 manzanas, avituallamos, y volvemos de nuevo a la avenida para seguir subiendo y conseguir así cubrir los metros que podrían faltar para hacer una vuelta exacta de 5k. El paso por el 4000 ya se sintió más lento que ninguno, viendo por primera vez más de 5'/km, y la cosa no mejoró al pasar por el 5000. 5km, 24:48 para completar la primera mitad de la carrera y la sensación de que iba a ser imposible mejorar, como había planeado, en la segunda vuelta.
Vi las señales de separación de las carreras de 5 y 10k y sentí una envidia enorme pensando en todos los que se quedaban ya bebiendo y recuperando, mientras yo tenía que dar una vuelta más.
El circuito: calor, repechos y supervivencia
Aparecía de nuevo en el recorrido la suave bajada hacia la rotonda sobre el túnel, el largo sube baja hacia el parque, remontar altura en la rotonda otra vez, quedándome clavado al asfalto...
El ritmo se estancaba cerca de los 5:05/km y no había forma de remontar. Cada mínimo repecho del recorrido, que recordaba perfectamente de la primera vuelta, me frenaba, y las suaves bajadas eran insuficientes para permitirme recuperar el aliento.
El camino cercano al polideportivo parecía no acabar nunca, el sube baja desde y hacia la rotonda del templo se pegó demasiado y solo se llevó un poco mejor por la música electrónica remember que algún vecino u organizador puso en la calle, algo que ayudó un poco a evadirme y luchar contra los pensamientos negativos. Ya sabéis lo que ayuda la música en el recorrido, un ‘¡ánimo!’ de un voluntario o el simple choque de manos con un chiquillo —o un abuelete— animando en la acera.
¿Se me iba a escapar una marca de 50'? ¿Tanto había perdido de velocidad y experiencia asfaltera en los últimos años montañeros?
Cuando acercándome a la rotonda de la iglesia Garmin avisó del paso por el km 9 en 45' pelados vi que, o corría el último mil a menos de 5'/km holgadamente o no bajaba de 50'. Apreté todo lo que pude, pero las piernas no parecían responder y el pulso se disparaba. Saber lo que tenía por delante no ayudaba. Mucho falso llano y una última subida hacia la meta que iba a frenarme bien.
Eché el resto, al borde del infarto, y ya en la recta final, cuesta arriba, vi que podría bajar de los 50 minutos si conseguía no morir en el intento. Sufrí como nunca y conseguí parar el reloj oficial en 50 minutos justos, 49:45 reales, 148 entre 284 finalistas, 27 entre 42 de mi categoría Veterano C, 134 entre 224 hombres.
![]() | |
|
No tan desastroso en cuanto a clasificación, al menos, pero las sensaciones y mi humor eran malísimos al terminar. Tal vez había sobrestimado mis posibilidades y verme tan flojo hizo que me enfadara conmigo mismo un buen rato. Nico estaba en la meta saludándonos a todos los que llegábamos. Me chocó la mano preguntándome cómo me había ido, a lo que apenas alcancé a responderle, por el reventón y mi bajona, con un seco "mal, bastante mal" mientras iba en modo zombi a recuperar líquidos y algo de energía (mil gracias, Nico, por nuestra conversación después en privado)
El avituallamiento era variado y con cantidad de sobra para todos, tanto en comida como en bebida. Pude comentar la carrera con los compañeros de La Tribu, que habían conseguido unas marcazas (la inmensa mayoría del club hacen el 10k fácil cercano o superando los 40'), algunos y algunas con podio, y me retiré pronto a casa a la ducha y a por sueño reparador.
Reflexión y mirada al maratón
No estaba contento, el circuito se pegaba mucho a las patas con tramos solitarios y el clima (y mi lamentable estado físico) no ayudaba a que saliera con ganas de repetir la carrera, aunque está montada de manera ejemplar. El 10k me pareció demasiado duro para la época del año en que se hace, saliendo además a las 18:30, pero en frío, pensándolo después, creo que al 5k sí que volvería. También en frío y con la cabeza más ordenada, creo que hay que saber reconocer el contexto en el que incluí el 10k en la preparación maratoniana. Sin correr a ritmos altos desde hace años, con la carga acumulada de la preparación para Elche-Alicante y, sobre todo, teniendo en cuenta que mi guerra es otra, esto es, poder rodar 42km sin morir y llegar a la meta del maratón, el 10k había que tomarlo como entrenamiento de calidad y listo.
Con mejor clima y algo más de rodaje, seguro que el ritmo medio de la carrera lo podría llevar incluso más km, pero como digo, lo importante sigue siendo el entrenamiento maratoniano, del que este fin de semana completaré 13 semanas de 20. Van varias ya de 5 días de entreno, pasando en la última de los 70km, y creo que empiezo a verme acabando el maratón dignamente, quién sabe (espero que sí), antes de las 4h, aunque mi objetivo siempre ha sido desde que empecé a prepararlo, simplemente poder terminarlo, pues soy consciente que tanto tiempo fuera del asfalto no se puede recuperar en 4 meses. A mi favor, espero, la resistencia física y mental acumulada en el Trail estos últimos 4-5 años.
La próxima prueba será el fin de semana que viene, en el medio maratón de Torrevieja. Una carrera a la que solo he ido una vez, en 2009 (creo que está entre las 5-6 primeras medias que hice) y en la que sí que confío que, con un clima más fresco y más rodado, pueda salir un resultado que me permita pensar en un maratón a buen ritmo. Y si no es así, no dejará de ser un entrenamiento de calidad con el mismo objetivo que todo lo que estoy haciendo desde julio, que no es otro que permitirme correr el maratón con unas mínimas garantías de finalizarlo y disfrutarlo al máximo.
Os cuento cómo ha ido todo la próxima semana.
🏁 10K El Altet 2025
📍 El Altet (Alicante)
⏱️ Tiempo: 49:45 (real)
🏃♂️ Ritmo medio: 4:58/km
🌡️ Condiciones: 27 °C, humedad alta
🧠 Sensaciones: Duras pero útiles para el maratón
🎯 Próximo objetivo: Medio Maratón de Torrevieja
Comentarios
Publicar un comentario
¡Hola! Debido a alto contenido de spam en los comentarios se ha activado la moderación de estos por mi parte. Recibiré un correo con tu comentario, lo aprobaré y quedará publicado. Evito así comentarios automáticos de publicidad china/rusa de casinos, apuestas, p0r_no etc. ;) ¡Te leo en breve! ¡Comenta! :-)